El hombro congelado es una patología muy dolorosa y limitante.
Los tratamientos con fisioterapia son largos y muy dolorosos.
La opción de la movilización bajo anestesia reduce los tiempos, pero aun así tras la movilización, con la ruptura de adherencias, te esperan semanas dolorosas y de rehabilitación intensas.

Con el tratamiento del tejido conectivo podemos conseguir la movilidad del hombro de una forma rápida, sin romper las adherencias (lo que implica hematomas e inflamación), sino modificando el tejido conectivo que es el responsable de la libertad de los movimientos.